En el área de RRHH y en los procesos de selección es habitual escuchar hablar del efecto Halo. Este fenómeno psicológico puede presentarse de muchas maneras por lo que el departamento de RRHH debe saber cómo detectarlo y hacer frente a ello.
¿Qué es el efecto Halo?
El efecto halo es un fenómeno psicológico que se produce cuando una persona tiene una impresión positiva de alguien y esta impresión influye en la forma en que evalúa a esa persona o cosa en el futuro. También puede suceder lo contrario, tener una impresión negativa que nos lleve a tomar decisiones precipitadas acerca de un trabajador o candidato.
Este fenómeno tiene una gran relevancia en el ámbito de los recursos humanos, ya que puede afectar la forma en que se evalúan y seleccionan a los candidatos para un puesto de trabajo, así como también puede influir en la forma en que se percibe y se trata a los empleados una vez que están en el puesto.
Este puede tener un impacto negativo en la toma de decisiones de los recursos humanos, ya que puede distorsionar la forma en que se evalúan a los candidatos y a los empleados. Por ejemplo, si un evaluador tiene una impresión muy positiva de un candidato durante una entrevista de trabajo, es posible que le conceda más importancia a sus virtudes y le conceda menos importancia a sus defectos.
Razones por las que puede presentarse el efecto Halo
Podemos distinguir varios motivos que pueden darse individualmente o en conjunto y que pueden ocasionar este fenómeno psicológico:
- Atractivo físico. Si una persona es atractiva físicamente, es posible que los evaluadores la evalúen de manera más positiva en general.
- Vestimenta y apariencia. La vestimenta y la apariencia de una persona pueden influir en la forma en que se le evalúa.
- Conocimientos o educación. Si una persona tiene una buena educación o conocimientos, es posible que los evaluadores la evalúen de manera más positiva en general.
- Carisma. Si una persona es carismática o tiene una personalidad atractiva, es posible que los evaluadores la evalúen de manera más positiva en general.
- Primeras impresiones. Las primeras impresiones pueden tener un gran impacto en cómo se evalúa a una persona y pueden llevar al efecto Halo si se le da demasiado peso a esa primera impresión.
¿De qué formas puede presentarse?
El efecto halo puede presentarse de muchas maneras en el ámbito de los recursos humanos. Por ejemplo, puede ocurrir que un evaluador tenga una impresión muy positiva de un candidato durante una entrevista de trabajo, debido a su apariencia, su vestimenta o su forma de hablar, y esto puede influir en la forma en que evalúa al candidato en otras áreas, como sus habilidades técnicas o su capacidad de trabajo en equipo. Del mismo modo, un evaluador puede tener una impresión negativa de un candidato durante una entrevista de trabajo, y esto puede influir en la forma en que evalúa al candidato en otras áreas, incluso si el candidato tiene una excelente formación y experiencia previa.
El efecto halo también puede presentarse una vez que una persona está en el puesto de trabajo. Por ejemplo, si un empleado es muy simpático y tiene una buena relación con sus compañeros de trabajo, es posible que se le evalúe de manera más positiva en general, incluso si no está realizando su trabajo de la manera más eficiente. Del mismo modo, si un empleado es muy inteligente y tiene un alto nivel de conocimientos técnicos, es posible que se le evalúe de manera más positiva en general, incluso si no es un buen trabajador en equipo o tiene problemas para interactuar con los demás.
Problemas e inconvenientes asociados al efecto halo
Un reclutador que se deje llevar por el efecto Halo podría suponer problemas en los procesos de selección tales como:
- Falta de objetividad
- Carencia de credibilidad en el proceso
- Distorsionar la forma en la que se evalúa y selecciona a los candidatos para un puesto
- Selección errónea del candidato
- Impedimento para reconocer las habilidades a fortalecer del candidato
- Dificultad para dar un buen feedback, siempre hay algo que se puede mejorar
- Error en la toma de decisiones
¿Por qué se produce este efecto?
Podemos distinguir distintos factores que afectan a la empresa y sus responsables a la hora de darse este efecto psicológico:
- Sesgos inconscientes. El efecto halo puede ser el resultado de sesgos inconscientes que tenemos todos, como la tendencia a favorecer a las personas que se parecen a nosotros o a aquellas que comparten nuestras mismas creencias o valores. Estos sesgos pueden distorsionar nuestra evaluación de los candidatos y los empleados, y pueden llevar a decisiones de selección y de gestión de personal poco justas e imparciales.
- Discriminación. Este efecto puede deberse a una discriminación consciente o inconsciente del empleado o el cadidato. Esto puede distorsionar la forma en que se evalúan a los candidatos y a los empleados basándose en factores que no tienen nada que ver con su capacidad para realizar el trabajo. Por ejemplo, puede llevar a descartar a un candidato por su apariencia o por su origen étnico, incluso si tiene las habilidades y la experiencia necesarias para el puesto de trabajo.
- Problemas de relación: El efecto halo también puede deberse a problemas de relación en el lugar de trabajo. Por ejemplo, si un empleado es muy simpático y tiene una buena relación con sus compañeros de trabajo, es posible que se le conceda más flexibilidad y se le conceda menos atención a sus deficiencias o a la forma en que podría mejorar. Esto puede llevar a la falta de respeto y a la falta de equidad entre los empleados.
¿Cómo combatir el efecto Halo en los procesos de selección?
Para evitar los problemas del efecto halo, es importante tomar medidas para minimizar la influencia de las impresiones subjetivas en la evaluación de los candidatos y de los empleados. Algunas de las medidas que pueden ayudar a minimizar el efecto halo incluyen:
Utilizar evaluaciones objetivas
Las evaluaciones objetivas, como pruebas de conocimiento o evaluaciones de habilidades prácticas, pueden proporcionar una medida más precisa de las habilidades y conocimientos de un candidato. Así estaremos tratando de evitar la evaluación subjetiva y basarnos en los hechos y datos en lugar de juicios personales.
Evaluar mediante métodos multifactoriales
Utilizar métodos multifactoriales para evaluar a las personas puede ayudar a minimizar el efecto Halo en los procesos de selección. Los métodos multifactoriales son aquellos que tienen en cuenta varios factores o criterios al evaluar a una persona.
Varios evaluadores en los procesos
Tener más de un evaluador puede ayudar a equilibrar la evaluación y a minimizar el efecto Halo, ya que cada evaluador puede contribuir con perspectivas y enfoques diferentes.
Realizar entrevistas semiestructuradas
Las entrevistas semiestructuradas, en las que se hacen preguntas específicas a todos los candidatos, pueden ayudar a evitar que los evaluadores se dejen llevar por el efecto Halo al evaluar las respuestas de los candidatos.