Las empresas están cada vez más involucradas en realizar procesos de evaluación del desempeño laboral para detectar posibles carencias entre la plantilla e identificar las fortalezas del empleado. Para medir el desempeño laboral existen distintos métodos, uno de los más utilizados es la evaluación 360 grados. Te contamos cómo llevar a cabo esta técnica que se considera una de las más efectivas.
¿Qué es la evaluación 360 grados?
Es el método que sirve para medir el desempeño laboral de los trabajadores. La evaluación, también conocido como feedback 360 grados, está siendo una de los más empleados ya que abarca una evaluación tanto cualitativa como cuantitativa.
Si aplicamos la evaluación 360 grados en nuestra compañía podremos medir el rendimiento de los trabajadores para detectar carencias y saber en qué debemos hacer cambios. También se podrán evaluar cuáles son las competencias de cada empleado. Con toda esta información que obtenemos podremos diseñar planes de formación para la compañía, implementando planes de carrera o de desarrollo del personal.
Características: ventajas e inconvenientes
Lo primero que debemos tener claro es que realizar esta evaluación 360 implica una gran inversión de tiempo. A cambio, este método aporta una visión completa que el resto de métodos. El tiempo que se tarda en realizar esta evaluación 360 no es de extrañar debido a que es la combinación del resto de metodologías de evaluación.
Por otro lado, la evaluación 360 nos proporcionan datos más objetivos al evaluar las competencias de distinta forma, teniendo la visión de compañeros, responsables, colaboradores o subordinados, involucrando a diferentes departamentos. La visión de las fortalezas y debilidades del empleado será mucho más completa que si utilizáramos una evaluación menos extensa.
Debemos preocuparnos por saber cómo gestionar el proceso ya que podríamos tener problemas. Podemos tener toda la información generada sobre la evaluación de un empleado centralizada en un gestor documental que agilice el tratamiento de los datos.
¿Cómo realizamos una evaluación de 360 grados?
El primer paso que debemos realizar es preparar y planificar cómo vamos a medir los distintos aspecto como las competencias, funciones y habilidades de cada empleado. En este punto deberemos decidir qué preguntas vamos a hacer a cada uno y elaborar los cuestionarios. Después del diseño, comunicaremos a los empleados implicados cuál va a ser el procedimiento que se va a realizar y explicaremos para qué sirve y por qué es importante realizarla.
Una vez comenzada la evaluación con los criterios previamente planificados, intentaremos que se automaticen todos los procesos. Así invertiremos menos tiempo en las tareas más mecánicas y podremos realizar el proceso entre departamentos de forma más sencilla para todos.
Análisis y conclusiones
Por último y no menos importante, ya que si no, no habrá servido de nada el proceso, deberemos realizar la recolección de todos los datos obtenidos para poder analizarlos y así sacar conclusiones. Para ello elaboraremos un informe donde se reflejen y que figure de forma sencilla y bien estructurada. Así podremos recurrir a ellos siempre que los necesitemos para revisar los datos obtenidos.
Es prioritario este paso de análisis para llevar a cabo las acciones oportunas por parte de la empresa. De nada sirve realizar la evaluación si luego no tomamos medidas en base a los datos obtenidos. Es probable que necesitemos realizar cambios estratégicos con algunos empleados o detectemos carencias o problemas que puedan resolverse a tiempo.
Si quieres saber cómo realizar la evaluación de desempeño de tu empresa, hemos preparado esta guía para ayudarte en sus pasos.