No es nada nuevo decir que organizar los cuadrantes de vacaciones de empleados es un quebradero de cabeza para todas las empresas. La utilización de soluciones digitales promete optimizar el tiempo y las gestiones del departamento y facilitar las consultas y solicitudes de los empleados. Pero antes de optar por estos softwares destinados a cubrir las vacaciones y ausencias de un equipo, hay varios factores que debemos tener presentes.
Días de vacaciones que pertenecen al trabajador
El Estatuto de los Trabajadores regula en el artículo 38 este aspecto estableciendo, como mínimo, 30 días naturales de vacaciones al año para cada trabajador. Los convenios colectivos pueden establecer las vacaciones en días laborables, pasando a ser de 30 días naturales a 22 días laborables.
¿Y cuál es la diferencia entre los días de vacaciones laborales y los naturales? Pues bien, si la empresa contabiliza las vacaciones teniendo en cuenta los días laborales, excluiremos los festivos que existan en ese periodo (sábados, domingos y festivos). Por el contrario, si es en días naturales, deberemos contar todos los días de descanso, también los festivos.
Un ejemplo: Un empleado trabaja de lunes a viernes y va a coger de vacaciones de jueves a domingo. Si sus vacaciones son de días laborables, deberá contar tanto jueves, viernes, sábado y domingo; cuatro días en total. En cambio, si dispone de días naturales, únicamente se computarán dos días de vacaciones: jueves y viernes.
Esta gestión de días de vacaciones puede resultar aún más complicado cuadrarlo y llevar la de las vacaciones en el caso de que la empresa cuente con turnos rotativos.
¿Puede el empleado elegir sus días de vacaciones?
La respuesta es sí y no. El trabajador puede seleccionar qué días de vacaciones le gustaría disfrutar, pero siempre debe de existir un acuerdo con la empresa. En resumidas cuentas, las vacaciones se fijan siempre con un acuerdo entre la empresa y el empleado. Si este acuerdo no fuese posible, la decisión de la empresa es la que prevalece.
Existen convenios colectivos que establecen periodos determinados donde obligatoriamente deben tomarse vacaciones. Seguro que conoces muchas empresas donde está determinado que el mes de agosto haya que coger vacaciones, o que sea sí o sí los días de Navidad.
Para fijar de manera más sencilla el cuadrante de vacaciones de empleados conviene que las compañías dispongan de una política de vacaciones donde se establezca, por ejemplo, cuántos empleados pueden tomar sus días libres en un mismo periodo.
Tener en cuenta todas estas variables estableciendo el cuadrante de vacaciones de empleados puede resultar misión imposible si no contamos con una herramienta destinada a ello en nuestra empresa.
¿Qué ocurre si el empleado no gasta sus vacaciones?
Debemos saber que las vacaciones no disfrutadas, como norma general, no es posible sustituirlas por dinero ni acumularlas para el año que viene. Por lo tanto, las vacaciones deberán disfrutarse dentro del mismo año en el que se generan.
No obstante, existen casos en los que se considera que hay razones justificadas para llevar a cabo una acumulación de vacaciones. Las bajas de maternidad son un claro ejemplo donde, tras una baja de larga duración, el empleado no ha podido disfrutar sus vacaciones ese año.
También hay excepciones en los que las vacaciones no disfrutadas podrán ser pagadas. Es el caso de finalizar un contrato antes de que el trabajador haya utilizado todos sus días libres muy habitual también en las Empresas de Trabajo Temporal. También puede recibirse una compensación económica por las vacaciones si el contrato con la empresa termina en un periodo de incapacidad laboral y aún existen días libres sin disfrutar.
En el caso de que un empleado solicite una baja laboral durante su periodo de vacaciones, prevalece la baja. Por lo que el trabajador podrá disfrutar de sus días de libranza una vez termine la baja siempre y cuando no hayan pasado más de 18 meses.