Uno de los escenarios a los que puede hacer frente la empresa es la excedencia laboral de sus trabajadores. Este recurso puede utilizarlo el empleado para interrumpir su actividad laboral durante un periodo de tiempo determinado manteniendo en todo momento su vínculo con la empresa. Eso sí, existen ciertos requisitos y consideraciones que debemos tener presentes.
Más allá de conocer su concepto, debemos saber también los tipos distintos de excedencia laboral que existen y aquellos casos en los que un empleado puede acogerse a cada una de ellas.
¿Qué es la excedencia laboral?
Llamamos excedencia laboral al periodo de tiempo en el que los trabajadores interrumpen su actividad dentro de la empresa, suspendiendo su contrato con la compañía, pero sin finalizarlo
Consideraciones establecidas en el Estatuto de los Trabajadores
En el Estatuto de los Trabajadores las excedencias vienen reguladas en el artículo 46, donde se describen los distintos marcos de ejecución para esta herramienta jurídica. En ellos se describen también las limitaciones de la excedencia:
- Si dos o más empleados de la misma empresa solicitar esta excedencia por la misma causa, el empleador podría limitarlo por motivos justificados en relación con el funcionamiento de la empresa.
- Durante el primer año de excedencia, el trabajador tiene derecho a que le guarden su puesto. Tras este tiempo, la reserva se referirá a un puesto de trabajo del mismo grupo profesional o de una categoría equivalente.
- El empleado que solicita la excedencia conserva solo un derecho preferente a su vuelta en las vacantes de igual o similar categoría a la suya.
- Cuando el trabajador forma parte de una familia numerosa, la reserva de su puesto se extenderá a un máximo de 15 meses. En el caso de familia numerosa especial, esta reserva se alargará hasta los 18 meses.
Tipos de excedencia laboral
Podemos encontrar hasta tres tipos distintos de excedencia laboral. Es importante conocer las diferencias de cada una de ellas para saber sus requisitos.
Excedencia laboral voluntaria
La excedencia voluntaria sucede cuando es el propio trabajador quien la solicita por cualquier motivo. Estas excedencias pueden durar desde los 4 meses hasta un máximo de 5 años, según también el caso que sea. El empleado puede solicitarla varias veces, eso sí, dejando un periodo de tiempo entre una y otra de cuatro años. Existen diversos motivos por los que puede solicitarse la excedencia voluntaria, siendo estos los más frecuentes:
- Excedencia voluntaria por el cuidado de hijos. En caso de nacimiento, adopción o acogimiento de un menor, la excedencia voluntaria puede durar hasta los 3 años como máximo.
- Excedencia voluntaria por cuidado de un familiar. Si tenemos familiares de hasta segundo grado con alguna incapacidad o enfermedad grave, podemos solicitarla durante un máximo de dos años.
- Excedencia voluntaria por intereses particulares. En este caso, la empresa no paga el salario al empleado y este tampoco cobrará el paro, por lo tanto, no cotizará en la Seguridad Social, ni computará a efectos de antigüedad. Este empleado podrá trabajar para otras empresas si el convenio lo permite.
Excedencias pactadas
En este caso, existe la suspensión por mutuo acuerdo, un tipo de excedencia laboral temporal que se produce en condiciones y plazos acordados entre la empresa y el trabajador. En este lapso de tiempo no se computa en las cotizaciones.
Excedencia laboral forzosa
Este tipo de excedencia, asociada al ejercicio de cargos públicos, se concede para realizar las funciones sindicales de ámbito provincial o superior. También puede ocurrir al ser nombrado el trabajador para un cargo público que le imposibilite de realizar sus labores. La duración dependerá del tiempo en el ejercicio del cargo, conservando el puesto y computándose la antigüedad del empleado.
¿Cómo solicito la excedencia laboral?
Los empleados, en primer lugar, deben tener claro de qué tipo es la excedencia laboral que quieren solicitar y qué aspectos involucra este acuerdo. También es importante saber que debe avisarse como mínimo con un mes de antelación y deberemos llevar al menos un año de antigüedad en la empresa.
En el caso de excedencia laboral voluntaria por el cuidado de familiares, el trabajador es necesario que aporte la documentación requerida para acreditar dicha situación.
La solicitud debe realizarse por escrito en un documento donde figure la fecha donde se va a abandonar el puesto y cuándo se va a reincorporar. De esta forma, la empresa deberá estudiar el caso y autorizarla para ver si cumple los requisitos. En el caso de cumplirse los requisitos la empresa debe saber que la autorización de la excedencia debe ser obligatoria.
Para gestionar las excedencias laborales desde RRHH podemos ayudarnos de una herramienta de gestión documental y así centralizar los archivos de cada trabajador en su perfil. Así no tendemos problemas a la hora de gestionar todos los documentos, quedando todo registrado y sin traspapelarse.